Infumable bodrio televisivo (ni harto de Anís del Mono me creo que "esto" se haya estrenado en una sala de cine), protagonizado por un zombie caucásico, con el acompañamiento de unas cuantas figuras "florero", y que por no tener, no tiene siquiera el saborcillo "colorista retro" hasta cierto punto simpático que Roger Corman le dio a sus 4 Fantásticos.

Con una fotografía catódica, propia de telenovela venezolana, sin acción (en absoluto),con diálogos aburridos y una realización deleznable en la línea estética de "episodio piloto" en serie TV ochentera, pero peor, completan el oprobio unos efectos especiales que, por inexistentes, no llegan ni a rozar el saldo.

Algún que otro secundario interesante como Ronny Cox o Ned Beaty. Por Dios..¿Qué hacen aquí?...¿Los drogaron para que aceptaran participar?

Huir sin mirar atrás.