Con un poco de suerte alcanzaré el olvido, y mi mente conseguirá pensar que solo hay una versión, que es la de la secuela.
El director de esta versión de hulk fue galardonado y nominado a los Oscars, pero hay directores que no son capaces de adaptarse a cualquier situación y este es un claro ejemplo. Un intento fallido de trasladar a la pantalla la adaptación de Hulk.
Para mi los efectos especiales no destacan lo que deberían, esos brillos en la piel, ese intento de conseguir expresividad en primeros planos.
Hubiera sido más interesante insinuar sin mostrar precipitadamente al ser que esconde tras de si el doctor.
Me parece más interesante y atractiva la manera de presentar al monstruo en la segunda parte, desde la oscuridad, con susurros y respiraciones al ritmo del paso, dejando entrever partes del cuerpo en pequeños destellos.
También soy de la opinión que las viñetas, o intento de creación de las mismas era innecesario. Generan confusión, no permiten centrar la atención, lo que me hace pensar que se vale de ellas para que no se aprecie la debilidad de la historia.
La gente va al cine a ver una película, y ya sabe que está basado en un comic.
Es un supuesto intento original de mostrar una adaptación de comic, que a mi personalmente me resulta ridícula.
El reparto resulta anodino y se echa en falta mayor entereza y coherencia en el argumento que se nos presenta.
Pobre adaptación, que a pesar de contar con los medios necesarios para convertirse en una referencia, acaba cayendo en el olvido.