Fantomas. es una especie de maestro del crimen que emplea todo tipo de trucos para salirse con la suya.
La película tiene un toque simpático que ayuda a seguir su desarrollo y aunque no me haya resultado completamente satisfactoria, tiene puntos a favor para recibir el aprobado.
Es inevitable pensar que es una especie de James Bond maligno, algo que le da cierto encanto.
El paso del tiempo puede que haga que muchas de sus secuencias queden desfasadas, pero hay elementos que quedan como inmejorables.
Nos encontramos ante todo un maestro del robo de identidades, con humor y elegancia.