Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Laura_Carneros:
6
Drama Luis (Luis Bermejo), profesor de literatura en paro, trata de hacer realidad el último deseo de su hija Alicia (Lucía Pollán), una niña de 12 años enferma de cáncer terminal: tener el vestido oficial de la serie japonesa de dibujos animados "Mágical Girl Yukiko". El elevado precio del vestido llevará a Luis a intentar encontrar el dinero de forma desesperada cuando conoce a Bárbara (Bárbara Lennie), una atractiva joven casada que sufre ... [+]
20 de octubre de 2014
34 de 48 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sigue buscando. Sigue rascando. Sigue llorando. Insistir, chantajear o dar pena, son algunos de los trucos más fáciles y comunes para conseguir lo que se desea. Satisfacer la demanda ya es más difícil. La responsabilidad del mago va más allá de sacar el conejo de la chistera cuando se le exige. No todos tienen entre las manos el poder suficiente para realizar el truco perfecto: dividir el cuerpo de un espontáneo del público puede acabar en tragedia, si no se ha practicado lo suficiente. Luis no ha practicado lo suficiente. Se lanza a la aventura de intentar conseguir el sueño de Alicia, su hija. Una niña con leucemia que quiere ser una magical girl. Y eso, en la vida real, es muy caro. En la búsqueda desesperada por ganar dinero, Luis se cruza con Bárbara, y de esta manera improvisará un truco chapucero que acabará salpicando sangre.

A Carlos Vermut, director de “Magical Girl”, le pasa lo mismo que a su protagonista Luis. No porque sea chapucero. Es un ilusionista en potencia. Lo tiene todo preparado para que esta película sea un golpe maestro. Minuciosamente hilado. Elementos como la banda sonora, dejarán al espectador tremendamente fascinado (el uso del sonido llama poderosamente la atención, por su simbolismo y poética en el tratamiento). Hay escenas que golpean directamente a los sentidos, sin atravesar ningún filtro. Diálogos cargados de sinceridad y críticos con la actualidad. Escenarios y secuencias bellísimas, que Vermut dirige con su batuta mágica. El joven cineasta ha ganado la Concha de Oro a la mejor película y director en el último Festival de San Sebastián. Se ha ganado a la crítica. Se lo merece. Pero. Pero Vermut (permítase la comparación desde mi humilde punto de vista) es como Harry Potter recién llegado a Hogwarts. Sorprende, todos lo quieren y lo esperan después de que su ópera prima “Diamond Flash” dejara a muchos con las ganas de otro encuentro. Vermut encabeza la expedición junto a nuevos directores en busca de la senda olvidada del cine español, esa que se desvía hacia el cine de autor y que pocos en nuestro país han sabido explotar.

A Carlos Vermut le queda mucho por mostrar. “Magical girl” entusiasma, pero no es redonda. Su misterio es un canto a la sutileza más despiadada: aquella que golpea desde el silencio interior las miserias de cada uno. Sutileza que finalmente queda rota de una manera, para algunos, magistral. En mi caso, no termina de arrastrarme, a pesar de haberlo esperado con ganas. “Magical girl” pretende cerrar el círculo y a la vez dejarlo abierto. Quizás de forma artificiosa, quizás como tenía que ser. En todo caso, el espectador más exigente deberá seguir buscando y seguir esperando la evolución de esta nueva promesa de la magia negra.

lauracarneros.wordpress.com
Laura_Carneros
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow