Tardas un poco en pillarle el punto, pero enseguida lo consigues. El panorama social que retrata es desolador, y la fotografía en tonos oscuros lo acentúa. La violencia racial que refleja, tan real como realista. Respecto a los actores, tengo que hacer una severa crítica: pocas veces he visto un protagonista, en este caso el joven protagonista negro, menos idóneo para el personaje que representa. No da ni física, ni actoralmente, la consistencia que el papel requería.Luego tiene algunas otras lagunas de guión, como por ejemplo que no nos orienta ni sobre las épocas del año en la que de desarrolla la trama, ni sobre las tareas que se llevan a cabo en los campos. Vale, hablan del algodón y se ve que llueve mucho, mucho, ¿pero en qué época llueve?, y, aparte del algodón ¿tienen algún otro medio de vida?. Pero a pesar de ello, vale la pena verla. Y sufrir un poco.