Más contento que el señor sonrisas después de terminar esta SERIE donde se aplica una complejidad y un trasfondo que ya quisieran el 99% de las producciones modernas.

Llevaba muchísimo tiempo buscando esto, buscando una historia empapada de fuerza y que no solo tuviera escenas de tensión y de sustos. Yo no veo nada fácil que el terror y el suspense estén al nivel de una historia. Normalmente se termina cojeando por alguno de los dos lados, pero aquí está meticulosamente medido para que eso no ocurra.

La conexión del pasado y presente de una familia. Pasado donde ocurrió algo trágico. Presente donde ocurre algo trágico. ¿Puede existir algún atisbo de luz? Podríamos responder a eso, diciendo que las ventanas de la oscura Hill House casi siempre están iluminadas.

Esto no es sólo un debate con los muertos, es también un debate con los vivos. Los miedos que desde pequeños nos cogen de la mano nos arrastran a la habitación más oscura, y cuando miras tu mano, nadie te está agarrando. ¿Solución? Encerrarlos en un rincón de tu mente para obviarlos e intentar vivir tu vida como si no pasara nada, pero sabes que es inútil. Hasta que no vomites esos miedos tendrás la misma fiebre para siempre.

The Haunting of Hill House hace cuestionarte tu propia persona.

Pero sin duda, lo que es para mi lo mejor: te muestra cómo un sitio seguro puede ser a su vez un abismo mortal. ¿El ejemplo más claro? Una familia.

Partiendo de todo lo dicho anteriormente pasamos a la ejecución técnica, a las actuaciones, al guion... y defienden muy pero que muy bien el motivo principal.

La alternancia entre pasado y presente es para disfrutarla una y otra vez hasta que partas la línea del tiempo. Las distintas formas en las que los personajes se encuentran afectados por el mal y el cariño que recoges con cada uno es entrañable. El capítulo 6 (Two Storms) es para verlo en bucle. Las escenas de tensión, suspense y los sobresaltos (con algunos que me han sorprendido). Las alusiones y los cierres de esas cosas misteriosas que no entendías y que se resuelven, consiguiendo que tu impresión y tu sorpresa no sea efímera. No quiero entrar en más detalles, porque quiero que la veas tú mism@.

Si hay algo que dé mas miedo que los fantasmas, que asuste más que una figura en la noche, que impacte más que un ruido estridente en mitad del silencio, es quién lo crea, quién lo forja y quién finalmente lo hereda.

Reflexiona bien si tú no estás ahora mismo en la habitación roja.