Pues a mi no me ha gustado tanto, por dos cosas: 1) la relación de Batman con la chica, porque mitifica a la chica. 2) el personaje de Batman, porque lo mitifica y lo justifica como la solución a Gotham, es decir, ya no es un superhéroe, ya es Hércules reencarnado, un semidios adorado por doquier. El Batman de Nicholson y Burton es más ameno, más desenfadado, no sé, es sólo un superhéroe, pero no es dios. Y por lo de los mensajes que transmiten los papeles interpretados, pues serán todo lo poderosos que se quiera, pero tampoco son las primeras verdades sobre las que descansan las demás. De efectos especiales está bien, pero tampoco ofrecen nada nuevo.