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Voto de Montana:
8
Animación. Fantástico. Bélico Cuenta la historia de una unidad naval que consta del propio Momotaro (capitán de un portaaviones) y de varias especies animales que representan a las razas del Extremo Oriente que luchan juntas por un objetivo común. En una dramatización del ataque de Pearl Harbor, esta unidad ataca a los demonios de la isla de Onigashima, que representan a los estadounidenses y británicos, demonizados por la propaganda japonesa. La película emplea ... [+]
6 de junio de 2020
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
ALERTA. CUIDADO. PROPAGANDA, PROPAGANDA. Mire uno donde mire, sea en la sección de comentarios de Youtube sea en IMDB sea en una crítica de un blog amateur, va a encontrar, irremediablemente, en torno a las películas de Mitsuyo Seo del período bélico el ominoso sustantivo "propaganda".

Me pregunto qué mediometraje habrán visto los demás, porque yo no he visto propaganda por ninguna parte. Hay que tener claro que una cosa es el uso que le dieran las autoridades de la época o la interpretación que le diese el público objetivo (que sería, sí, la de la exaltación de la patria), y otra bien distinta la intención del autor. El artista, en todas las épocas, debe cuidarse de hacer públicas ciertas verdades que el vulgo y la élite contemporáneos no están preparados para oir. La herramienta para hacer invisible al imbécil la verdad es la ironía. Las pistas que deja el artista para reconocerla (dado que, generalmente, no conocemos sus opiniones y no puede recurrir, como en el discurso oral, a voces afectadas, sonrisas torcidas o aspavientos) son el absurdo o la incoherencia.

Los cantos homéricos fueron empleados durante siglos para educar a generaciones de jóvenes por creerse que contenían valiosas enseñanzas morales. No podían saber los helenos que el padre de la literatura occidental trataba la moral de su tiempo de manera irónica y hasta satírica, en ocasiones. Tomemos de ejemplo al personaje de Néstor, al que Homero califica de "venerable" y "sabio anciano", tan sabio que cada consejo que da en la Ilíada produce un resultado opuesto al esperarlo (es este portentoso orador el que tiene el dudoso honor de convencer a Patroclo de que vista la armadura de Aquiles). Lo que nos dicen el narrador o los personajes, como vemos, no se corresponde con lo que muestra el narrador. Por algo será.

En "Las águilas marinas de Momotaro" está presente, sí, la mitología propia de un estado-nación imperialista, pero fijémonos en que son los personajes los que toman esos mitos y supersticiones por ciencia, y eso no quiere decir que el autor piense del mismo modo. La cámara -el narrador- lo que nos muestra son unos soldados japoneses que distan de ser ideales, un comandante autista y siniestro, y una nación que decide atacar a los ogros rojos y azules (representados, también, como bufones cobardes, vagos y borrachos) sin ningún motivo aparente. La inclusión de los personajes secundarios del águila y su polluelo sirven, además, para demostrar lo importante que es ayudar al prójimo, la arbitrariedad de la guerra (el primer impulso del monito es abatir a la mamá águila) y el dolor que puede causar al llevarse a nuestros seres queridos. Si el señor Seo era un propagandista, era, desde luego, uno pésimo.

Aunque "Las águilas marinas de Momotaro" fuese un film propagandístico, que no lo es, su visionado debería ser obligatorio para cualquier futuro animador o cinéfilo por su calidad estética (¿es que no eran propaganda las películas de Eisenstein y hoy se tienen por clásicos?). Pese a estar influido por los cortos de los hermanos Fleischer, Mitsuyo Seo demuestra una gran personalidad, y un dominio del montaje y la construcción de planos sorprendente. Tristemente, me temo que sus dos obras más famosas seguirán siendo vistas como ejercicios infames de enaltecimiento de un régimen demonizado por los regímenes actuales. Incluso si leyesen este texto, muchos seguirían pensando igual, pues pesa más, mucho más, lo que piensen ingleses y estadounidenses: si 500 años después del descubrimiento de América, todavía hay gente que se traga la Leyenda Negra (españoles e hispanoamericanos incluidos), ¿cómo va a interpretarse correctamente una película de dibujos animados producida hace apenas tres cuartos de siglo por los enemigos del imperio norteamericano?

Por cierto, se me olvidaba: Mitsuyo Seo era izquierdista y fue torturado y encarcelado por ello.
Montana
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