Película de la cuál lo único interesante es la presencia de Billy Zane, cascado ya desde que fuera el guapo malo de "Titanic". Esta película es absurda desde el principio hasta el fin, no se sostiene en cuanto a nada. Mark Dacascos sale esperpéntico sin ningún relieve en su personaje. Es más y más de lo mismo, toda vez que esta cutrez de serie B la pobre no tiene donde alunizar, con efectos malos, horrorosas interpretaciones y un contexto vacío e inexistente. Vacía.