Recuerdos que valen la pena. Recuerdos de medianoche. Son los recuerdos de esta inolvidable y atrevida película de finales de los cincuenta "Hiroshima mon amour", que cuenta una historia tipo Carlos fuentes "ella se sienta y recuerda" (...) y no está sóla está con su amante oriental. Con un poco conocido pero brillante reparto la película aunque en glorioso blanco y negro es una película viva, que rebosa un gran magnetismo azuzado con las oscuras dosis de pasión, con ecos de tragicomedia sobretodo en su expresión, es una gran opción para cualquier alma melancólica. Todo en ella es bueno.