Que conste que soy un apasionado del cine de terror....

Nada me hubiese gustado más que REC hubiese sido ese "rara avis", que cada cierto tiempo aparece en el género, que sea el modelo a imitar por sus virtudes.

Aunque la película tiene muchas virtudes, evidentemente (inmediatez, formato y hasta atmósfera), creo que al final se ve lastrada por un guión cogido con alfileres (como le suele pasar casi siempre a Balagueró).

Cierto es que la película consigue lo que busca, es decir, una colección de sustos importante, pero el regusto final a refrito creo que le hace perder puntos.

Porque no nos engañemos, a parte de que la historia es regulera, los constantes gritos de los personajes no ayudan mucho a hacer más creíble la historia. Por no hablar del desvío final de la historia, que no tiene mucho sentido.

Cierto es, que en los próximos meses veremos remakes y copias a patadas de esta película, y probablemente alguno le supere, pero esta podía haber sido una película redonda que marcara un antes y un después y queda en una especie de gurruño taquillero.

Por último el final, muy complaciente y poco currado, sinceramente, se puede esperar más, y de hecho esperaba mucho más.

En resumen, película entretenida para pasar un mal rato, pero sin más. Olvidable porque todo lo hemos visto antes y se podía haber hecho mucho más por la historia. De hecho, da la sensación de que los directores se han quedado tan contentos de la buena idea que han tenido, que se han olvidado de llevarla a cabo como Dios manda. La forma se impone al fondo una vez más.

El cine español va por el buen camino, pero aún le falta aprender un poco. Al menos, que devuelva al público a las salas...y REC creo que tiene la virtud de conseguirlo.