No es nada innovador, no es impresionante y tampoco es una película que te vaya a cambiar tu percepción del cine. Podrías incluso decir que es una película mediocre en ciertos aspectos. Tiene un guión bueno, con ciertos clichés, pero bueno; y sin embargo, a pesar de que según la ves sabes que tiene muchas cosas que no sobresalen de la media la sigues viendo. No sé si es la actuación de Matt Damon; el enorme Robin Williams; o la afinidad entre Minnie Driver y Damon en sus escenas, dándole otro nivel a la relación.

Es una película sobre relaciones humanas sobre un contexto poco verosímil de un chico que es un genio, pero son unas relaciones tan bien construídas que te hacen olvidar el resto de la trama. Al acabar la película no recuerdas tanto a Will Hunting como un genio en realidad, lo recuerdas como una persona.