No me ha gustado “Incendies” y, además, me parece una mala película por mucho que la crítica especializada y la mayoría del respetable digan que es un peliculón, una joya cinematográfica o una obra de arte. De entrada, el guión de la película me parece lo más artificial y rebuscado que he visto en mucho tiempo. No tengo ningún problema con las historias que se basan en las coincidencias o casualidades de la vida, pero joder es que esto es ya el colmo de lo rocambolesco. De verdad os digo que el argumento de cualquier culebrón televisivo me parece más verosímil que el de esta película. Sinceramente, me creo antes que a alguien le toque el bonoloto, la primitiva, el gordo de la primitiva, el euromillón y el cupón de la Once del viernes (todo junto y en la misma semana) en vez de lo que le acontece a esta “pintoresca” familia. Y lo de pintoresca lo pongo entre comillas porque no sé muy bien como definirla.

La forma de contar la historia tampoco me ha convencido. Abusan de los flashbacks para reliar intencionadamente la narración. Te cuesta bastante cogerle el punto a la historia, ya que el presente y el pasado tienen los mismos escenarios, dos actrices como protagonistas que son parecidas físicamente (encima visten casi siempre de forma similar) y, además, apenas se da información que ayude a ubicar el tiempo y el lugar en que se desarrollan los acontecimientos. Asimismo, toda la trama está impregnada de una temática de guerra entre religiones que todavía la hacen aún más complicada de seguir.

Al margen de todo esto, quiero hacer hincapié en que la película aburre de manera atroz. Sí, es lenta y aburrida como ella sola (únicamente tiene una escena intensa, la del autobús, en 130 minutos de duración). Además, conforme avanza el metraje cada vez encuentras todo más ridículo y pasado de rosca.

Y poco más voy a añadir. Tengo muy claro que “Incendies” está pensada de cara a la galería, o sea, es una cinta fabricada para ser halagada por los críticos especializados de cine y que busca desde el minuto 1 triunfar en cuantos premios y festivales de cine le sean posibles. En resumidas cuentas, “Incendies” es una película hecha para que los críticos de cine la pongan en un altar… y eso, sinceramente, a mí no me va.