“Reykjavík-Rotterdam” es un thriller de los que yo llamo de diseño, ya que contiene todos y cada uno de los elementos clásicos del género. Esto en principio no me parece ni bien ni mal, sino que ya depende de cada uno juzgarlo, o sea, al que le guste este género cinematográfico le atraerá la propuesta y, en cambio, al que busque originalidad pues no le hará tanta gracia. Si me pides mi opinión al respecto, pienso que la cinta no está mal después de todo (por lo menos cumple y entretiene). Aquí han optado por impregnar al relato de un estilo propio del cine negro: la trama gravita sobre hechos delictivos, los personajes son muy ambiguos (no hay ni buenos ni malos de forma definida), el protagonista de la historia es el típico antihéroe que arrastra un pasado oscuro y, por último, la sociedad que se muestra es violenta, mafiosa y corrupta hasta la médula.

El filme es bastante correcto en sus formas y hace que no te aburras, esto no voy a negarlo, pero deja un sabor en el paladar muy familiar. Eso es debido a que ya has visto multitud de películas de similares características. Si antes de verla pensaras en las cosas que te vas a encontrar, lo más seguro es que no te equivocarías en ninguna… ¿hay matones? Sí. ¿Hay mamoneos por culpa de la droga? Sí. ¿Hay tiroteos, palizas, mujeres en peligro de muerte, traiciones de tu mejor amigo, trapicheos de contrabando y cocaína? Pues también. Todos estos elementos hacen que te invada una sensación de saturación, de que esto ya lo has visto antes mil millones de veces.

Sin duda, su mayor error es su aceleradísimo pulso narrativo. Una cosa es un ritmo alto o que no decaiga, y otra muy distinta es que todo suceda a velocidad supersónica. Se han equivocado de pleno dándole más velocidad de la cuenta al desarrollo de los acontecimientos (incluso algunas veces ocurre todo tan rápido, de manera tan atropellada, que ni siquiera te da tiempo a digerir un suceso de la narración cuando ya ha comenzado uno nuevo).

¿Merece la pena verla? Pues puede que la cinta no sea ninguna maravilla pero al menos resulta aceptable, así que creo que sí. Siempre agradezco ver una película que sea medianamente decente, ya que últimamente hay cada basura suelta por ahí que hace que hasta me arrepienta de ser amante del séptimo arte. Te aseguro que he visto castañas mucho peores y mucho más pretenciosas que esta. Así pues, si te gusta el thriller y no eres muy exigente con el producto en cuestión, yo creo que puedes pasar un rato ameno con “Reykjavík-Rotterdam”.