Lo primero que voy a hacer en mi crítica es darle al César lo que es del César. Me explico, Ben Affleck hace una buena labor interpretativa en la película y, además, lo hace de cine como director. Yo soy uno de los que ha puesto a parir a Ben Affleck en más de una ocasión por ser un pésimo actor (en mi opinión, es de lo peor junto con Christopher Lambert, Steven Seagal y Thomas Jane). No obstante, en “The Town” tengo que reconocer que ha dado el do de pecho a nivel interpretativo y, más aún, dirigiendo.

Que recuerde ahora mismo, el último filme que he visto de temática similar (atracos a bancos o furgones blindados) fue “Blindado” de Nimród Antal. Sin llegar a ser una porquería (la película estuvo aceptable), la cinta que nos atañe no sólo le da 3 patadas en la boca a todos los niveles sino que, además, me parece una buena película con todas las de la ley.

¿Qué te espera en “The Town”? Pues te espera un thriller dramático bien realizado, bien narrado y bien interpretado. Personalmente, me ha gustado bastante la forma en la que moderniza un género tan clásico como el cine negro para volverlo convencional. Me ha parecido un filme con una historia atractiva, con un suspense espléndido por saber qué ocurrirá y al que, en definitiva, le puedo poner muy pocas pegas.

Sí que es cierto que este producto no te va a dar nada que no hayas visto antes, pero la realidad es que la originalidad en el cine es una quimera salvo excepciones que se pueden contar con los dedos de una mano. A mí no me importa ver algo que no sea original siempre y cuando esté bien hecho, entretenga y cumpla en sus diferentes facetas como película. Y quiero hacer un especial hincapié en que nada de lo que te ofrece “The Town” es una medianía: la historia y la forma de desarrollarla es interesante, las interpretaciones son de buen nivel (incluso las de los actores más secundarios), los efectos especiales son espectaculares en las persecuciones, tiroteos y escenas de acción, el ritmo narrativo es el idóneo (ni lento ni alocado), la adrenalina te sube en las escenas de los atracos, la ambientación es perfecta y, por último, la parte romanticona de la trama es quizás lo que más flojea del conjunto, pero en ningún momento es ñoña o resulta irreal (enamorarse de una directora de banco como esa es de lo más humano por muy atracador de bancos que se sea).

Sobre el desenlace no me voy a extender mucho por razones obvias. Únicamente voy a comentar que es lo que menos me ha gustado del filme, junto con la parte romántica como he mencionado anteriormente, aunque siendo sincero tengo que decir que tampoco lo han hecho tan mal dadas las circunstancias (tal y como había transcurrido la película no cabían muchas más opciones).