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Voto de Maestro de Marionetas:
5.351
Aventuras. Comedia
Obsesionado con la idea de rodar una película sobre la miseria y el sufrimiento, el director de cine John L. Sullivan convence a los ejecutivos del estudio para que le permitan recorrer el país disfrazado de vagabundo antes de empezar a rodar. Después de trabajar como peón para una viuda que espera de él algo más que cortar leña, huye de su casa, pero el camión que lo recoge lo lleva de vuelta a Hollywood. Sintiéndose completamente ... [+]
7 de agosto de 2013
2 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
He vuelto a revisitar esta obra maestra como la copa de un pino y ¡¡cómo me he vuelto a emocionar!!.
Magistral guión (cómo está hilado, cómo va derrumbando cliches, maniqueismo y situaciones partidarias), unas actuaciones excepcionales, una puesta en escena soberbia y una música maravillosa para este clasicazo con mayúsculas que pasa del drama a la comedia y de la comedia al drama de una forma tan natural, tan impresionante.
En la retina, dos momentazos:
Toda la escena donde se nos muestra ,sin palabra alguna y arropado con una música excepcional, las andanzas de la pareja para buscarse la vida. ¡¡¡Puro cine mudo!!
La entrada de los presidiarios en la iglesia del pantano al son de los canticos negros de sus parroquianos. ¡Soberbiaaa!, se me erizan los pelos nada más recordarla
Y como propina, el momentazo del niño conduciendo el 'tanque'. ¡¡Hilarante!!
¡¡¡Qué maravilla!!!, a veces parece un manual de cine, una lección magistral. Una de mis favoritas.
Magistral guión (cómo está hilado, cómo va derrumbando cliches, maniqueismo y situaciones partidarias), unas actuaciones excepcionales, una puesta en escena soberbia y una música maravillosa para este clasicazo con mayúsculas que pasa del drama a la comedia y de la comedia al drama de una forma tan natural, tan impresionante.
En la retina, dos momentazos:
Toda la escena donde se nos muestra ,sin palabra alguna y arropado con una música excepcional, las andanzas de la pareja para buscarse la vida. ¡¡¡Puro cine mudo!!
La entrada de los presidiarios en la iglesia del pantano al son de los canticos negros de sus parroquianos. ¡Soberbiaaa!, se me erizan los pelos nada más recordarla
Y como propina, el momentazo del niño conduciendo el 'tanque'. ¡¡Hilarante!!
¡¡¡Qué maravilla!!!, a veces parece un manual de cine, una lección magistral. Una de mis favoritas.
