Sandra pone a prueba al misógino/a que todos llevamos dentro: ¿es capaz una mujer inteligente de “seducir” al hombre de sus sueños utilizando sus dotes intelectuales? Me hubiera gustado un final más abierto, más hacia el “sí”. Pero me he percatado que la ha escrito un hombre. Entonces, nada que hacer, hará la película para que concuerde con su “idea de mundo varonil perfecto”.
Y es que estoy hartita de ver que cuando en una peli rechazan al friki de turno, quién lo rechaza (¡oh sorpresa!) es la más zorra del instituto...y encima nos endosan a las féminas frasecitas del tipo: “has dejado a quién te va a valorar, cuidar,...” (que nos aclaren desde el principio si es un friki lo que rechazamos o Gandhi, que entonces nos lo pensamos mejor, joé) en ese momento le daría la enhorabuena a la zorra por no dejarse engañar y mandar al diablo al friki...¿no es lo mismo que hacen los machos alfa con las féminas frikis sin remordimiento alguno? Pues ala, que cada palo aguante su vela, es lo que parece decir la cara de la zorra mientras le arranca el corazón al chilindrón. Y eso que a los norteamericanos les mola vender su imagen con el slogan de “confía en tí mismo” pero claro, eso no incluía a las mujeres. Eso era para los negros y gente que no era rubia ni medía metro setenta...women´s no, thank you
Incluso en el desenlace, la propia Mary tiene que dejar que el supermegamacho de TV se lleve la gloria. ¡Pero si es ella quién tuvo la idea!¿De qué tienes miedo Mary? ¿De que te critiquen los alfamegacríticos de Washington? Pues ya lo han hecho, han puesto tu peli a parir...ala que cada palo aguante su vela. Será que las zorras tienen conciencia de género y no se comen el primer pollo sólo porque les dice kikirikí...un respeto.