Ignasi M. es Ignacio Millet, un curador y restaurador de arte, catalán, padre de dos hijos y VIH positivo. Ignasi vive la vida con mucha energía y pasión y es el motor de este documental de Ventura Pons.

A través de encuentros-entrevistas con todas las personas importantes dentro de la vida de Ignasi, Ventura Pons muestra como es se la pasa este personaje tan peculiar, cada encuentro supone una verdadera sorpresa.

Y es que Ignasi es tan potente como personaje que pareciera que rebasa todo el tiempo a su director, la puesta en escena y todo lo demás; Ignasi habla con sus padres, es ex esposa, sus dos hijos, amigos, colegas, ex socia y algún chico argentino, todos con momentos interesantes y alguno que otro incluso desopilante.

La estructura del documental es bastante básica en apariencia, Ignasi se encuentra con sus seres queridos y charlan de la vida, lo que llama la atención son ciertos contraplanos que avisan de, quizás, una segunda cámara en el lugar, o, más probable y por lo mismo cuestionable siendo un trabajo documental, una puesta armada en la sala de montaje.

A pesar de esto, el documental de Pons permite conocer a un tipo vital que parece que nada pueda mantenerlo quieto y callado, aun en la situación en la que Ignasi vive hoy día, una película desatada, divertida y muy colorida.