FA
colaborador
Media votos
5,9
Votos
10.987
Críticas
1.503
Listas
276
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de Quique Mex:
5
11 de julio de 2014
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Segunda película de Humberto Hinojosa Ozcariz, luego de la irregular ‘Oveja negra’ ahora presenta un drama romántico juvenil y bilingüe.
Robo (Christian Vázquez), un chico con la facilidad de la palabra para conquistar chicas, pierde el oído en un accidentado acto heroico en la playa, tiempo después conocerá a Eve, una chica de California de visita en México de quien se enamora y piensa que lo podría curar cuando ella le habla.
Pero la cosa no será tan fácil, ya que su amigo Cobra ha demostrado interés por conquistar también a Eve, formándose un triángulo amoroso forzado, como muchas cosas de las que se suceden en esta película.
I Hate Love divaga entre un guión caprichoso y poco trabajado, donde todo sucede por casualidades y de manera forzada, los recursos narrativos de los que se vale el filme se agotan demasiado rápido y otros se vuelve repetitivos, pero lo que menos funciona es la parte medular de la historia: El triángulo amoroso.
Robo y Eva se conectan apenas a la primer mirada, Cobra por su parte, caprichosamente dice que enamorará a Eve pero nunca hace o le dice algo con esa intención, parecería que Eve ni se ha dado por enterada del interés romántico de Cobra.
Así las idas y vueltas en la relación de amistad entre Robo y Cobra, provocadas por la aparición de Eve, se tornan un juego mal planeado desde el guión con la intención de llevar la historia a un final tremendista y anticlimático.
Robo (Christian Vázquez), un chico con la facilidad de la palabra para conquistar chicas, pierde el oído en un accidentado acto heroico en la playa, tiempo después conocerá a Eve, una chica de California de visita en México de quien se enamora y piensa que lo podría curar cuando ella le habla.
Pero la cosa no será tan fácil, ya que su amigo Cobra ha demostrado interés por conquistar también a Eve, formándose un triángulo amoroso forzado, como muchas cosas de las que se suceden en esta película.
I Hate Love divaga entre un guión caprichoso y poco trabajado, donde todo sucede por casualidades y de manera forzada, los recursos narrativos de los que se vale el filme se agotan demasiado rápido y otros se vuelve repetitivos, pero lo que menos funciona es la parte medular de la historia: El triángulo amoroso.
Robo y Eva se conectan apenas a la primer mirada, Cobra por su parte, caprichosamente dice que enamorará a Eve pero nunca hace o le dice algo con esa intención, parecería que Eve ni se ha dado por enterada del interés romántico de Cobra.
Así las idas y vueltas en la relación de amistad entre Robo y Cobra, provocadas por la aparición de Eve, se tornan un juego mal planeado desde el guión con la intención de llevar la historia a un final tremendista y anticlimático.