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Voto de Pablo 747:
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Fantástico. Aventuras. Acción
Después de haber recuperado el reino del Dragón Smaug en la montaña, la Compañía ha desencadenado, sin querer, una potencia maligna. Un Smaug enfurecido vuela hacia la Ciudad del Lago para acabar con cualquier resto de vida. Obsesionado con las enormes riquezas en su poder, el rey enano Thorin se vuelve codicioso, mientras Bilbo intenta hacerle entrar en razón haciendo algo desesperado y peligroso. Pero hay aún mayores peligros por ... [+]
3 de marzo de 2015
5 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
En El Hobbit, toda está al servicio de la espectacularidad sin preocuparse por justificar muchos de los hechos que se suceden en su argumento. Esto no es más que un síntoma del planteamiento tan criticado desde el inicio de la saga al servicio de intereses puramente comerciales, pero qué se espera de hacer tres películas de un libro de apenas 300 páginas.
La continuos intentos de emparentar esta trilogía con la épica historia con que Jackson concluyo hace ya más de una década, sólo han servido para dotar de más artificialidad y menos naturalidad al relato, creando un argumento forzado a parecerse a lo que antaño funcionó tan bien, pero que ahora debería haberse renovado de otra manera, especialmente en su duración.
La inclusión de Saruman, Galádriel, Radagast o acontecimientos cogidos de otros libros para rellenar el largo metraje de más de dos horas de cada una de las entregas, ha creado un relato que en ocasiones tiene poco sentido.
La continuos intentos de emparentar esta trilogía con la épica historia con que Jackson concluyo hace ya más de una década, sólo han servido para dotar de más artificialidad y menos naturalidad al relato, creando un argumento forzado a parecerse a lo que antaño funcionó tan bien, pero que ahora debería haberse renovado de otra manera, especialmente en su duración.
La inclusión de Saruman, Galádriel, Radagast o acontecimientos cogidos de otros libros para rellenar el largo metraje de más de dos horas de cada una de las entregas, ha creado un relato que en ocasiones tiene poco sentido.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
No quedaba mucho que contar en La batalla de los cinco ejércitos salvo una gran batalla y poco más, y así ha sido. La falta de contenido da lugar a una amalgama de luchas y más luchas que se puede dividir en la gran batalla de masas, y posteriormente en las sucesivas luchas individuales entre Légolas, Tauriel y Kili contra Bolgo y demás orcos, y Thorin contra Azog, para mí el mejor actor de toda la saga.
En el libro, lo que mueve la historia es la codicia por conseguir el tesoro que esconde el dragon, y aquí meten a Sauron y a los Nazgul como los causantes de todo mal, incluida la locura de Thorin, por el simple hecho de que son los antagonistas en el señor de los anillos.
Ante todo esta tercera parte de El Hobbit tiene varios aspectos que no llegan a justificarse, como los gusanos gigantes, los cuales son aparecen un segundo para hacer el alarde de efectos especiales y luego desaparecer sin más, la repetición de momentos ya vistos, como la transformación oscura de Galadriel.
En definitiva, Peter Jackson podría haber reducido la duración y mejorado el contenido, apartándose de la sombra de su obra maestra, para así crear una historia más fiel a la original, en la que el enemigo no era un señor oscuro, sino un sentimiento tan humano como la codicia, la cual no solo mueve a los héroes y fuerzas del bien, sino también a esos orcos y trasgos que asían por encima de todo conquistar los salones de Erebor para conseguir el ansiado tesoro que esconde.
En el libro, lo que mueve la historia es la codicia por conseguir el tesoro que esconde el dragon, y aquí meten a Sauron y a los Nazgul como los causantes de todo mal, incluida la locura de Thorin, por el simple hecho de que son los antagonistas en el señor de los anillos.
Ante todo esta tercera parte de El Hobbit tiene varios aspectos que no llegan a justificarse, como los gusanos gigantes, los cuales son aparecen un segundo para hacer el alarde de efectos especiales y luego desaparecer sin más, la repetición de momentos ya vistos, como la transformación oscura de Galadriel.
En definitiva, Peter Jackson podría haber reducido la duración y mejorado el contenido, apartándose de la sombra de su obra maestra, para así crear una historia más fiel a la original, en la que el enemigo no era un señor oscuro, sino un sentimiento tan humano como la codicia, la cual no solo mueve a los héroes y fuerzas del bien, sino también a esos orcos y trasgos que asían por encima de todo conquistar los salones de Erebor para conseguir el ansiado tesoro que esconde.