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Voto de burton:
3
8,1
21.115
Intriga. Thriller. Cine negro
Tras la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), el padre de Alicia Huberman, un espía nazi, es condenado por traición contra los Estados Unidos. Después del juicio, Alicia da una fiesta en la que aparece un apuesto desconocido llamado Devlin. Se trata de un agente de los servicios de Inteligencia que reclama su colaboración para atrapar a Alexander Sebastian, el cerebro de los nazis en Brasil. Al principio se muestra reacia, pero finalmente ... [+]
8 de enero de 2007
66 de 112 usuarios han encontrado esta crítica útil
Contemplo aturdido la increíble y casi unánime puntuación dada en este foro al "Notorious" original de Hitchcock, y me hace replantear si tal vez soy yo quien esté equivocado en considerarla una floja, flojísima película del maestro del suspense...
Pues durante la apenas escasa hora y media de metraje no encuentro ni un sólo punto de motivación que me lleve a considerarla como una obra maestra del cineasta británico.
Aburrida, tórpemente lenta, increíblemente mal narrada y con la impresión de haber sido rodada con prisas, la película, cuyo guión fue obra del ex-periodista y guionista de prestigio norteamericano, Ben Hetch, cae estrepitosamente en la nimiedad y la estulticia más solemnes...con la amenaza del uranio nazi de por medio contenido en botellas de vino de la Borgoña francesa de la cosecha de 1934, y escondidos en la bodega del sótano de la casa de un militante nazi exiliado en Rio de Janeiro...
Desde el momento inicial, cuando el padre de la protagonista Alicia Huberman (Ingrid Bergman), el dirigente nazi exiliado en los EEUU, John Huberman, es condenado a 20 años por sus crímenes y fechorías de guerra, hasta cuando inmediatamente y sin saber muy bien por qué ni dar tiempo al espectador a digerirlo, Alicia se lía con el invitado de una fiesta, el sr T.R. Devlin (Gary Grant), la película va diluyéndose poco a poco como un azucarillo en leche...
La trama harto simple y por momentos estúpida, carece del más mínimo interés en cuanto a los habituales y magistrales tempos y cadencias narrativas con los que Hitchcock nos solía sorprender...
Lo único reseñable de esta película es una estupenda fotografía en blanco y negro a cargo de Ted Tetzlaff...ni siquiera la habitual puesta en escena del maestro británico, apuesta segura en su filmografía, nos deleita o tan sólo llega a motivar con la blandísima estructura temática y rítmica...
Un verdadero chasco en todo su esplendor, el de esta película muy bien valorada por crítica y público en general, pero desde luego a años luz de obras como " Vértigo", "La ventana indiscreta" ó "Psicosis"...Y bastante por detrás de obras de temática similar como "Los niños del Brasil" de Franklin J. Schaffner, ó "Marathon Man" de John Schlesinger.
El propio Woody Allen a buen seguro bebió como fuente de inspiración de esta película por aquello de la bodega en el sótano en su última entrega, "Scoop".
En cuanto al reparto coral destacar eso sí la gran actuación de una magnánima Ingrid Bergman, la estupenda y carismática presencia de Louis Calhern, y la brillante intepretación de Claude Rains...
En fin, que espero no haber arruinado tus espectativas y por supuesto no dejes de ir a verla.
En cualquier caso una obra bastante,
M E N O R.
Pues durante la apenas escasa hora y media de metraje no encuentro ni un sólo punto de motivación que me lleve a considerarla como una obra maestra del cineasta británico.
Aburrida, tórpemente lenta, increíblemente mal narrada y con la impresión de haber sido rodada con prisas, la película, cuyo guión fue obra del ex-periodista y guionista de prestigio norteamericano, Ben Hetch, cae estrepitosamente en la nimiedad y la estulticia más solemnes...con la amenaza del uranio nazi de por medio contenido en botellas de vino de la Borgoña francesa de la cosecha de 1934, y escondidos en la bodega del sótano de la casa de un militante nazi exiliado en Rio de Janeiro...
Desde el momento inicial, cuando el padre de la protagonista Alicia Huberman (Ingrid Bergman), el dirigente nazi exiliado en los EEUU, John Huberman, es condenado a 20 años por sus crímenes y fechorías de guerra, hasta cuando inmediatamente y sin saber muy bien por qué ni dar tiempo al espectador a digerirlo, Alicia se lía con el invitado de una fiesta, el sr T.R. Devlin (Gary Grant), la película va diluyéndose poco a poco como un azucarillo en leche...
La trama harto simple y por momentos estúpida, carece del más mínimo interés en cuanto a los habituales y magistrales tempos y cadencias narrativas con los que Hitchcock nos solía sorprender...
Lo único reseñable de esta película es una estupenda fotografía en blanco y negro a cargo de Ted Tetzlaff...ni siquiera la habitual puesta en escena del maestro británico, apuesta segura en su filmografía, nos deleita o tan sólo llega a motivar con la blandísima estructura temática y rítmica...
Un verdadero chasco en todo su esplendor, el de esta película muy bien valorada por crítica y público en general, pero desde luego a años luz de obras como " Vértigo", "La ventana indiscreta" ó "Psicosis"...Y bastante por detrás de obras de temática similar como "Los niños del Brasil" de Franklin J. Schaffner, ó "Marathon Man" de John Schlesinger.
El propio Woody Allen a buen seguro bebió como fuente de inspiración de esta película por aquello de la bodega en el sótano en su última entrega, "Scoop".
En cuanto al reparto coral destacar eso sí la gran actuación de una magnánima Ingrid Bergman, la estupenda y carismática presencia de Louis Calhern, y la brillante intepretación de Claude Rains...
En fin, que espero no haber arruinado tus espectativas y por supuesto no dejes de ir a verla.
En cualquier caso una obra bastante,
M E N O R.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Arranca la película con la sentencia condenatoria a 20 años en prisión del dirigente nazi exiliado en EEUU, el señor John Huberman(Fred Nurney), casado con una ciudadana norteamericana y padre de nuestra protagonista Alicia Huberman (Ingrid Bergman)...
A continuación en una fiesta Alicia es presentada a un tal sr T.R. Devlin (Gary Grant) con quien súbitamente intima...
Posteriormente Devlin se presentará como agente de la C.I.A interesado en contratar sus servicios como topo para ayudarles a desmantelar la organización criminal nazi en el exilio Fabin de la que su padre fue miembro... Para ello deberían viajar a la ciudad de Rio de Janeiro...
Alicia accede sólo por amor. Incluso cuando Devlin le dice que es necesario que se case con el dirigente nazi Alexander Sebastian (Claude Rains), ella finalmente accede también por amor...
Aunque inicialmente el sr Sebastian dude de las intenciones de Alicia por aquello de que era amigo de su padre y sobre todo porque le veía a menudo en compañía de su querido Devlin, lo cierto es que Sebastian se enamora hasta las trancas de la bella y angelical Alicia...
Poco a poco Alicia va sabiendo los planes que se gestan en el salón de su casa con su nuevo marido, el sr Sebastian, como cabecilla...la fatídica alusión a una botella de vino de uno de los miembros del concilio nazi que habitualmente se reunían en el salón, el torpe y orondo Eric Mathis (Ivan Triesault), les pone sobre aviso...
Alicia constantemente y de forma clandestina pasando información a su amor verdadero, el sr Devlin...Unas botellas conteniendo uranio con las que contruir armas nucleares almacenadas en la bodega del sótano...
Cuando Sebastian pilla in fraganti a ambos besándose en el sótano finge perdonarles...Pero en connivencia con su retorcida y octogenaria madre, Madame Anna Sebastian (Leopoldine Konstantin), pergeña un maquiavélico plan para acabar de manera agónica con la vida de su esposa y sin levantar sospechas...la introducción de veneno en el té...
Alicia se siente repentinamente indispuesta y enferma...cuando descubre el desaguisado, huye ante la atenta mirada de los dirigentes nazis en compañía de su amado Devlin para de esa forma dejar en evidencia a su marido y a su mortífera mamá...
A continuación en una fiesta Alicia es presentada a un tal sr T.R. Devlin (Gary Grant) con quien súbitamente intima...
Posteriormente Devlin se presentará como agente de la C.I.A interesado en contratar sus servicios como topo para ayudarles a desmantelar la organización criminal nazi en el exilio Fabin de la que su padre fue miembro... Para ello deberían viajar a la ciudad de Rio de Janeiro...
Alicia accede sólo por amor. Incluso cuando Devlin le dice que es necesario que se case con el dirigente nazi Alexander Sebastian (Claude Rains), ella finalmente accede también por amor...
Aunque inicialmente el sr Sebastian dude de las intenciones de Alicia por aquello de que era amigo de su padre y sobre todo porque le veía a menudo en compañía de su querido Devlin, lo cierto es que Sebastian se enamora hasta las trancas de la bella y angelical Alicia...
Poco a poco Alicia va sabiendo los planes que se gestan en el salón de su casa con su nuevo marido, el sr Sebastian, como cabecilla...la fatídica alusión a una botella de vino de uno de los miembros del concilio nazi que habitualmente se reunían en el salón, el torpe y orondo Eric Mathis (Ivan Triesault), les pone sobre aviso...
Alicia constantemente y de forma clandestina pasando información a su amor verdadero, el sr Devlin...Unas botellas conteniendo uranio con las que contruir armas nucleares almacenadas en la bodega del sótano...
Cuando Sebastian pilla in fraganti a ambos besándose en el sótano finge perdonarles...Pero en connivencia con su retorcida y octogenaria madre, Madame Anna Sebastian (Leopoldine Konstantin), pergeña un maquiavélico plan para acabar de manera agónica con la vida de su esposa y sin levantar sospechas...la introducción de veneno en el té...
Alicia se siente repentinamente indispuesta y enferma...cuando descubre el desaguisado, huye ante la atenta mirada de los dirigentes nazis en compañía de su amado Devlin para de esa forma dejar en evidencia a su marido y a su mortífera mamá...