Cuando termine de ver “La fiesta de las salchichas” no sabía si reírme o sentirme burlado. El hecho es que esta nueva comedia tirada por Rogen y compañía es una de las entregas animadas más extrañas que se pueden imaginar, así lo confirma la secuencia final en el supermercado, como una de las escenas más desfachatadas y extrañas del cine animado de todos los tiempos. El filme se comporta como un producto para adultos y se llena de chistes directos cubiertos con un doble sentido muy poco sutil. La historia carece de originalidad y tampoco hay personajes que uno pueda sentir entrañables, es un filme como dije extraño, que bien te puede sacar una risa como aburrirte hasta el bostezo. Pero eso es “Fiesta de Salchichas” un extraño experimento que puede servir de inicio para muchas entregas animadas de parecida factura, en donde el divertimiento pasa por obscenidades tan graficas como debatibles, y no ni siquiera deteste el filme solo no me pareció divertido en la mayoría de su propuesta, es un “whatever” que trauma pero se olvida. Una idea que por sí sola no tiene más sustento que satisfacer morbos.