¿Acaso alguien lo dudaba? Los mercenarios han vuelto y esta vez con mas ayuda.
Sinceramente en los tiempos que corren merece la pena dejarse los cuartos en productos como este, en tiempos en los que los remakes están a la orden del día y dejan tanto que desear. Merece la pena dejarse un dinero en ver lo que Silvester Stallone se ha esforzado tanto en recuperar, porque lo ha hecho para que los que nacimos en los ochenta nos sintamos como en casa.
Tal vez el argumento peque de simple, que no tanto, o que la trama se desarrolle de una manera mas o menos singular, pero es exactamente lo que pedimos los ochenteros que sentimos nostalgia por aquellos tiempos.
Los mercenarios han vuelto, para disparar a diestro y siniestro, para salvarse de las situaciones más difíciles, para vérselas con situaciones incomprensibles...
Y es que de eso se trata, de eso trataban las películas que tanto añoramos. Nadie puede negar el mérito de Stallone de haber juntado a tantas estrellas del cine de acción de los ochenta y con ellos realizar un producto digno del cine que él mismo contribuyó a crear. La primera cinta, fue de lo mejor en cine de acción pudimos ver en los últimos tiempos y ahora Barney y su equipo vuelven con más furor que nunca.
Vuelven todos ellos, el elenco de la primera, y suma y sigue. Bruce Willis, Arnold Swartzeneger repitiendo papeles con más protagonismo y a Jean Claude Van Damme, que saborea cada momento en los que actúa como villano de la función.
El cine de los ochenta fue la década que nos dio de lo mejor que hemos visto en la industria y que alguien se dedique a recuperar su espíritu sin recurrir a remakes ya es digno de aplauso.
Los mercenarios 2 es una película obligada para aquellos que nacimos en los ochenta y crecimos con esa manera de hacer, esa forma de envolvernos en el cine de acción que no nos contaminaba la mente. Un tipo de cine que nos contagiaba las ganas de vivir aventuras y no protagonizarlas en la vida real. Un tipo de cine tristemente olvidado.
El cine de acción de los ochenta. Gracias Sly...