Si lees la sinopsis de la película te puedes esperar el típico drama de lágrima fácil. Pues es del todo equivocado.
Trata un tema dramático con humor y honestidad! Te hace sonreír más que entristecer y eso ya dice mucho de ella.
No soy muy dada a las películas de este estilo, el dramático, pero su simpleza y falta de avaricia por abarcar más de lo que se puede contar con una sonrisa en la boca la convierte en un ejercicio de contención excelente, casi tanto como los dos actores principales, desconocidos para mí hasta entonces.
Blablá... Verla!!! Vale la pena.