Antes de ver la película y leer la sinopsis sobre ésta, ya te supones que la película va a tener un argumento flojo dirigido más a un público infantil que a uno adulto, al que Ben Stiller aportará su toque humorístico del típico protagonista perdedor a la par que buenazo, con el que los productores se aseguran un enorme éxito de taquilla que es pretendido.

Nada más lejos de la realidad, la película tiene uno de los argumentos más infantiles y menos creibles de todas las películas del humorista. Pero aun dejando aparte este gran inconveniente que echará atrás a todos aquellos que busquen una comedia de corte más realista, Noche en el museo es una película bastante mediocre, que apenas logra despertar alguna sonrisa con alguna hilarante situación trabajada ( las menos), y que transcurre la mayoría del tiempo a un ritmo acelerado por el que no dejan de pasar y transcurrir situaciones irrealistas mayoritariamente absurdas , que provocan en más ocasiones la sensación de lástima por el intento fallido de crearnos risas que de provocarnos una verdadera carcajada.

Le salva de la estafa desde mi punto de vista la magnífica realización ,sobretodo la de los efectos del ordenador ( el T - rex cobra vida de manera excelente), una notable caracterización de los actores ( ver la cara "tonta" de Stiller hace gracia ) , aparte de la moraleja " de lo interesante y divertidos que pueden ser los museos".

En conclusión, tras haber visto Algo pasa con Mary y la primera parte de Los Padres de ella en donde Ben Stiller también es protagonista, películas con menos medios pero mucho más divertidas, la sensación que te deja Noche en el museo roza la de tomadura de pelo por parte de Hollywood. A la altura de "Zoolander" del mismo actor.