Esta es de esas películas dirigidas a un público no demasiado exigente, aquel que va al cine a pasar el rato y que no piensa que detrás de cada película tiene que haber un gran guión, una gran fotografía y unas poderosas interpretaciones. Digo esto porque Underworld Evolution es lo que es, un film con escasa argumentación en el guión, un tanto reiterativa y para colmo con algún que otro nubarrón, lo cual no quita para que tenga escenas fascinantes que te hacen apalancarte en la butaca.

De nuevo volvemos a ver una lucha sin tregua entre vampiros y hombres lobo, todo ello con una mujer de por medio, Kate Beckinsale. Ella es la luz entre tanto monstruo, ya que por mucho que corra, por mucho que sude, y por muchos tiros que peque o le peguen, siempre está bella. En este sentido la realización del film me ha parecido más que aceptable, ya que en cada momento en que la película pudiera parecer un poco cargante, siempre está ese plano de los ojos de Kate (acompañada además de una buena banda sonora) para dar un poco de brillo entre tanta sombra.

Por tanto lo dicho, si sois amantes de la acción seguramente esta película os gustará, al menos a mí no me ha aburrido en ningún momento, más bien todo lo contrario. Y aunque no es ninguna obra de arte, si tengo claro que está muy por encima de películas del mismo corte recientemente estrenadas como Van Helsing o Blade Trinity.