No está mal la trama. Ingenua, pero efectiva. Muy buen planteamiento y personajes representativos de muchos pueblos. Lo que no se puede es hacer una crítica si no has visto la película entera, por el motivo que sea. ¡Hombre!
A la hora de la verdad, las tramas de Hitchcock (y no quiero que las comparaciones vayan más allá) eran muchísimo más ingenuas y simples que esta, sobre todo las que se basaron en temas psicológicos y psicoanálisis, pero en fin, para gustos colores.
Con la excepción de Manuel de Blas, Juanjo Artero y Emilio Gutiérrez Caba, el resto de los actores parecen de grupo de teatro de aficionado de colegio. Entre ellos reina el histrionismo, a falta de una mejor actuación. A destacar el pésimo trabajo de la alcaldesa, del poli-padre, del hijo de poli y de la secretaria-amante del productor. Lástima de reparto para una idea que no está mal.