Asombrosa selección de historias sin relación directa entre ellas, únicamente hermanadas porque tratan de enseñar lo que en circunstancias muy especiales puede llegar a ser el hombre. Si los humanos nos definimos por nuestros actos y si sólo tuviéramos en cuenta lo que en "Relatos salvajes" nos es ofrecido, entonces el significado de la misma palabra 'humano' sería muy diferente al que tenemos en nuestra mente. Personalmente encuentro mucha afinidad con las situaciones límite que se plantean, cuando ya no hay freno del que tirar y lo racional desaparece como vía para solucionar los problemas. Entonces cada uno tira del instinto que le domina, ya sólo hay caos, rabia, ira, un despropósito detrás de otro y variados estallidos de actos siempre peligrosos. La incertidumbre se desata y en este caso, porque nosotros lo disfrutamos como espectadores, podemos darnos la enhorabuena de no ser protagonista ni secundario en carne y hueso de ningua de las historias que se plantean.

No suelo simpatizar con las películas hechas a partir de la suma de episodios sueltos, pero en este caso coincido con la nota que tiene porque me ha parecido un largometraje con un ensamblaje más que aceptable. Leer en los títulos de crédito iniciales que la productora "El Deseo" de Pedro Almodóvar estaba detrás era un aliciente y puedo decir que en el momento en que acaba lo entiendo todo un poco más. Dicho de otra manera, no esperaba menos del manchego, creo que entiendo más el despliegue de "Relatos salvajes" teniendo en cuenta quién está detrás.

No quería hablar de una historia únicamente, pero me encantaría,por un día en mi vida, que me invitaran a una boda como la del último episodio. Ojalá algún día pudiera ser el hipotético espectador de algo así, eso no tendría precio.