Película infravalorada, pero de culto y muy querida por sus fans. No apta para snobs.

Pitch Black podría considerarse "ciencia-ficción hard" y bastante respetable. Esta su secuela puede verse de manera independiente, y además se mete de lleno en el género "fantástico ambientado en el futuro", donde la ciencia es lo de menos. Aquí lo que importa es la acción, y hay bastantes elementos puramente fantásticos.

Importante ver la "director's cut" y no la versión comercial!

Empieza flojito, y el primer tercio es algo más aburrido y convencional, pero no la dejen, porque va cogiendo ritmo, después se hace frenética, y el final es apoteósico y a la altura de los buenos cuentos de Robert E. Howard.

A mí el diseño de producción no me pareció para tanto. Es estilo cutre, en plan "Dune".

Lo mejor de esta película es la multitud de pequeños detalles interesantes que salpican todo el guión:

¿Qué me dicen de la cantidad de frases chulescas de todos los personajes? Hacen que Bruce Willis parezca inocurrente y anodino. "¡Vaya, por fin un poco de atención!". Ja, ja, ja!
¿Qué me dicen de la prisión de máxima seguridad en Crematoria, ese planeta tan agradable?
¿Qué me dicen de Thandie Newton en su papel de cortesana sexy, ambiciosa y ultrachunga?
¿Qué me dicen de Karl Urban, que por lo visto nunca ha excitado tanto a los gays como en esta película?
¿Qué me dicen del extraño poder del líder de los malos, que es tan raro que cuesta describirlo?
¿Qué me dicen de Anatoli? Tiene olfato para los problemas... ¿Y de la carrerita con la música trepidante?

Por favor: no desprecien totalmente esta película. Si les pilla de malas, disfrutarán de cine de acción de mamporros y tíos duros mientras comen palomitas; y si les pilla de buenas, se divertirán de lo lindo con una película de acción de factura mucho más inteligente de lo que parece a primera vista, y volverán a verla varias veces.