PEro, por favor, corran a leer la novela: una auténtica maravilla que de verdad les dejará sin respiración.

La película logra con creces su objetivo y, ya digo, hay que verla, pero sobre todo si después, o antes, da igual, uno se toma el trabajo de leer este novelón, el más importante de su autor, Truman Capote, de quien se realizaron dos películas precisamene sobre este asunto de su creación de A sangre fría, la gran novela que surgió de su investigación de un hecho real.

En CAPoTE, interpretado por Seymour Hoffman es donde mejor se retrata a este autor que se dejó la piel en la investigación y creación posterior de este crimen bestial, pero que olvidó lo esencial, la solidaridad, la humanidad por encima de la búsqueda del éxito. Y consiguió el éxito por todo lo alto, internacinal, le dio dinero y fama... pero nunca pudo superar el sentimiento de culpa por no haber hecho más por ellos... A tal punto que murió a los sesenta años atiborrado de alcohol y drogas. Esto no tiene que ver con esta película pero lo que de verdad interesa es ver la película, leer la novela y luego ver el Capote de Seymour. Un pack impresionante.