Empiezo con este argumento porque bajo mi punto de vista, aquellos que hemos disfrutado de la obra de John Carlin debemos de ser realistas y admitir que el film no exprime ni mucho menos el potencial de la novela.
Por una parte, me parece uno de los trabajos mas flojos de Eastwood como director. Con esto no quiero decir que sea un intento fallido sino que el trato que reciben algunos detalles como la trama política o la profundidad de los personajes hacen que se nos presente un guión descafeinado que hace que nos quedemos con la miel en los labios (al menos aquellos como yo que esperábamos grandes cosas de este largometraje).
Respecto a las actuaciones, gran trabajo de Freeman en el papel que llevaba toda la vida intentando representar (admitido por el mismo en diversas entrevistas promocionando la película) pero que no se ve secundado por unas discretas interpretaciones del resto del elenco de actores, lo cual me induce a pensar que esta obra no es más que un tributo de Clint Eastwood enfocado al lucimiento de su gran amigo Morgan Freeman.