Escribo esta crítica después de haber visto el capítulo 3x10.

Hasta hoy, le había puesto a esta serie un 8/10, pero después de ver los dos últimos capítulos de la tercera temporada, no se merece esa nota, desde luego que no: un diez es lo mínimo que se le puede dar.

Esta serie comenzó siendo "una de piratas", y punto, y yo no necesitaba más excusas para verla. Me encantan las historias de piratas, si pudiera elegir una época y un lugar en los que vivir que no fuesen aquí y ahora, elegiría el Caribe, en la edad de oro de la piratería.
Y aún así, aún siendo un "fanboy" del contexto, me parecía una serie normalita, una precuela entretenida para "La isla del tesoro" de Robert Louis Stevenson. Hasta hoy.

La primera temporada es suavecita, no se puede negar, pero al fin y al cabo, la productora y el canal responsables de la serie, poco pueden hacer frente a las superproducciones de canales como HBO o AMC. Sin embargo, viendo la audiencia y el potencial de la serie, alguien (no sé quien eres, pero te lo agradezco de corazón) decidió exprimir este producto y por eso escribo esta crítica.
La segunda temporada es un "crescendo" magnífico que acaba en un clímax dificilmente superable. Pero aún así, yo mantuve mi nota. La serie estaba mejorando, pero le faltaba algo.
Pero sin duda esta tercera temporada (ya hay fecha para la cuarta) ha sido el punto de inflexión en el que esta serie ha alcanzado su madurez. Por la profundidad a la que han llegado sus personajes y el guión. Porque sorprende. Porque es refrescante, está bien realizada y las actuaciones cada vez tienen mayor calidad (aunque aún hay margen de mejora).

Pero si hay algo que me pone la piel de gallina es ver como se están atando cabos para encajar de forma mágica con La isla del tesoro. Está perfectamente adaptada y es creíble para alguien que haya leído y disfrutado la novela (como yo) y me dan escalofríos de pensar que esta aventura esté tocando a su fin, porque por nada del mundo quiero que se acabe.