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España España · Valencia
Voto de Marius:
6
Comedia. Drama Para no ir a parar a una residencia de ancianos, cinco viejos amigos deciden empezar a vivir juntos; a ellos se une un joven estudiante de etnología cuya tesis se centra en el estudio de la población anciana. (FILMAFFINITY)
12 de junio de 2012
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Et si on vivait tous ensemble?" (¿Y si vivimos todos juntos?) es el segundo largometraje de Stéphane Robelin, guionista, realizador de cortometrajes y de documentales para TV.
Se trata de un discurso sobre la dicotomía entre juventud y vejez, salud y enfermedad, vida y muerte. Su estilo muestra esa seductora mezcla de comedia y drama en la que el cine francés se muestra casi siempre muy acertado. La historia está bastante suavizada ya que muchos aspectos de la vida real son bastante más crueles y amargos que la forma en que vienen representados en este relato de ficción, de manera que predomina un cierto tono optimista y benevolente fruto de una visión tan generosa e irónica sobre el ser humano con sus virtudes y sus flaquezas, subrayando aspectos como la amistad, el sexo, la comida, el amor, etc.

Robelin confiesa haber hecho este film -una coproducción franco-germana- movido por dos razones fundamentales: reunir en un relato coral a un grupo de conocidos actores maduros y recordar con afecto a sus propios abuelos en su progresivo envejecimiento, poniendo de relieve que son pocas las personas que se preparan, tanto física como psicológicamente, para vivir felizmente a partir de la jubilación y, sobre todo, en la ancianidad. Un hecho agravado en los últimos tiempos cuando los hijos ya no suelen ocuparse personalmente de sus padres incapacitados por diversos motivos.

"¿Y si vivimos todos juntos?" aborda también un tema generalmente silenciado como es el de la sexualidad de los ancianos y lo hace con realismo y valentía ya que los personajes no son inválidos sino seres afectados por los años o por alguna grave enfermedad. Con escenarios y decorados que evitan todo rasgo de modernidad, de un estilo burgués acorde con la edad y la clase social de los protagonistas, la película es a la vez un testimonio del declive vital de los seres humanos y una propuesta esperanzadora -dominada por el humor- dirigida a atemperar los aspectos más tristes de la existencia.

Pero no sin razón se podría acusar al film de ser excesivamente idealista ya que revivir el espíritu libertario y comunitario de los revolucionarios años 60-70 en personas que queman la última etapa de su vida es un argumento utópico que no encaja con la dureza y exigencia del mundo actual.
Marius
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