Todas las plataformas quisieron dar su regalito de navidad y Amazon no iba a ser menos, SALTBURN, esta comedia satírica de las clases pudientes, venía de saltarse su estreno en cines, llegando a España directo a Prime.
Esmerald Fennell justo con su elenco liderado por dotado Barry Keoghan, lo dieron todo en poco más de dos horas y que seguro ruborizarán a más de un padre si la ve con los peques.

Objetivamente destaca por tener un apartado visual muy cuidado y una banda sonora que los nostálgicos del indie adorarán. Que no obstante cojea por un guion y una puesta en escena que carecen de lo que presumen, originalidad y clase.
Para nosotros es un 6 que parece agradar también a la crítica.

Por lo personal, nos resultó una película entretenida, que no ha sabido llevar correctamente la sátira de clases afectando en su realismo y emotividad, regodeándose en escenas perturbadoras donde el mensaje era claro: por el dinero, lo que sea [Escupitajo en la mano].
Y que hablando como cinéfilo (quizás espectadores casuales, pueda ser distinto), no llega a terminar de sorprenderte, no al menos, por lo que debería.

Lo que más nos gustó aparte de la música, fue en el trabajo con las luces y colores para transmitir más mensajes sin necesidad de incluir diálogos redundantes y que hacían destacar a los actores.
Lo que menos, el guion predecible con giros que se veía a leguas del que la critica parecía tener especial fascinación y voluntad trasera [Escupitajo en la mano].
Todo sea dicho, en conjunto, terminamos al menos satisfechos.

Si os ha gustado esta película u os intriga la sátira de clases, pero ejecutado a la perfección, recomendamos encarecidamente ver PARÁSITOS.
La directora también os regalará las mismas sensaciones en UNA JOVEN PROMETEDORA.
Y el actor también os sorprenderá por la gran.... DUNKERQUE.


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