Es una delicia ver cómo los actores disfrutan haciendo esta película, viéndose a la legua que está como en un ambiente más distendido que se hermana mayor Vengadores Infinity War. Desde el principio se aprecia que va a ser una obra ágil y dinámica, que no para hasta que acaba, y transcurre en apenas dos o tres días que pasan fugaces como ciertas estrellas: Pero no es el caso de las que aparecen en el filme: todos están geniales, e incluso el talludito Michael Douglas, con todo el cine que tiene a sus espaldas, se nota que disfruta del cine de Marvel, aunque sea para evadirse, sin muchas pretensiones de cara a críticos muy críticos y haters voraces que pululan por las redes. Mientras tanto, y diga lo que diga el resto, yo disfruto con este bocado hasta que llega el desenlace ¿final? de Veng4dores. Los meses pasarán, pero yo con este Ant-Man y La Avispa me voy quitando de encima un poco el monillo. Pero de nuevo esa escena post-créditos te deja anonadado y de nuevo empiezan a elucubrarse nuevas teorías que le dan poder, más si cabe, al advenimiento de Capitana Marvel.
Como digo, disfruten de este caramelito PEZ desfasado hasta que lleguen los pesos pesados y nos abran las puertas de una nueva fase. El dinamismo de la primera entrega se ve superado por esta gracias a la aparición de la increíble Avispa de Evangeline Lilly, que por cierto, en algunos momentos se me da un aire a Nerea Garmendia (ahora en Allí Abajo); una villana con poder y malas pulgas personificado por Fantasma (Hannah John-Kamen) y un grupo de matones mal avenidos liderados por un sorprendente y casposo Walton Goggins (Los Odiosos Ocho).
Esto sólo es el comienzo del final del desenlace.