Un thriller insustancial y manirroto que apenas aporta novedad al género de lo tan convencional que llega a ser. Con una historia tan simple como decir "casa", su único fuerte es que a pesar de sus inconvenientes se deja ver y es una película de poca duración.
El veterano Joseph Ruben (El Buen Hijo) dirige una cinta rutinaria sin esfuerzo y con un elenco corto, que vive con lo justo de su ajustado presupuesto y la simpleza de su guión. Tampoco se logra una tensión narrativa y visual como se debiera, pero logra mantener la atención hasta el final, por muy previsible que sea (tanto como el desenlace de un caramelo a la puerta de un colegio).
Lo más destacable son las interpretaciones de Michelle Monaghan (Código Fuente) y Michael Keaton (Batman),que se esfuerzan para ser creíbles en sus papeles y al menos lo logran, a pesar de contener muchos clichés típicos de los personajes del género.
Atrapada en la Oscuridad es una obra prescindible que si bien logra mantener la audiencia, no aporta nada al thriller, con algunas escenas decentes y otras que más parecen sacadas de un circo fantástico, no cuenta nada de las intenciones ocultas de la protagonista y deja muchos interrogantes al espectador, y el final es más de superhéroes que otra cosa: es como si Daredevil estuviera en la película. Eso sí, la escena final, sí, la del final del todo, es lo mejor de la película. Quizás el mayor acierto del guionista en todo el libreto. Bravo por él.