Interesante película social sobre la inmigración.
Trata la vida en Alemania de un padre y sus 2 hijos iraquíes, los días previos, y posteriores a la captura de Sadam Huseim, desde su llegada gracias a las mafias a todo lo que supone llegar a un país occidental de primer nivel, sin trabajo, sin casa, sin amigos y con 2 hijos enfermos.
Evidentemente, situación durísima, contada de manera bastante elegante.
Sólo un “pero” a la película, le falta “latir”. No me ha hecho sentir nada, al no transmitir la dureza de la situación con más fuerza, te lo cuenta todo tan bien que no te hace pensar mucho tampoco.
En definitiva película correcta, pero plana.
Vista hoy en la Seminci.