Miren, que sí, que yo entiendo que cada director, o productor, o estudio, tiene derecho a financiar o crear sus propios productos cinematográficos... pero luego que no se quejen cuando la opinión pública les da la espalda.

Este caso, "Men", me parece, ni más ni menos, el caso de un producto fabricado para subirse al carro del feminismo hembrista, y ganar "likes", apoyos mediáticos, financieros, y políticos, denunciando que los varones son malos [sustitúyase "varones" por "hombres blancos" o por "varones heterosexuales"], malísimos, y no merecen siquiera la aplicación del Principio de Caridad (aquel que defiende que debería interpretarse las acciones de alguien, sobre todo si ese alguien es lejano en el tiempo pasado, con el máximo de comprensión posible); y sus actos deben ser condenados sin excepción, porque todos los varones [entiéndase blancos heterosexuales] son tóxicos.

Dicho ésto, la película tiene una buena fotografía de unos excelentes escenarios (no se les ha sacado todo el partido posible) y las actuaciones no son malas (tampoco tan sobresalientes como dicen algunos usuarios, que insisten - increíblemente, a mi juicio- en destacar la interpretación de Jessie Buckley sobre la de Rory Kinnear, que hace casi todos los papeles de malvado de la película) pero ello no es suficiente para rescatar a la película de ser un panfleto ideológico.

Hay gente que dice no entenderla, pero no ofrece misterio, y sin caer en spoiler: los hombres son muy malos, y ya (Bueno, vale, vayan a SPOILER).