Estábamos en cierta manera avisados. El poder del dinero es un metraje cuyo título ya huele a usado y aunque durante los primeros treinta minutos presenta cierto ritmo argumental, bien apoyado por una excelente fotografía de la metrópolis neoyorquina , su trama va decayendo de una manera tan brutal que en su fase final logra realmente aburrir y hasta desenganchar al espectador. Y es que esta película carece de fuerza argumental, de personajes elaborados , dinamismo,verosimilitud e intriga alguna. En definitiva , un gran fiasco predecible de principio a fin que no saca a flote ni la veteranía de Harrison Ford (cuyo personaje pasa prácticamente de puntillas) ni el expresivo Richard Dreyfuss ,que sólo consigue hilar 4 frases insulsas y breves. Elijan otra.