La riqueza y el poder que da el oro (el dinero) es capaz de cambiar los corazones. LA opción final la evaporación de todo en el viento de los absurdo, trae la risa y lo mejor el entendimiento y la cordura.
La cordura es lo que pierden tres vagabundos, buenos hombres, perdidos en la mendicidad de Tampico México Distrito Federal. La peli se rueda en exteriores aunque es claustrofóbica y teatral. No sabemos nada de la historia ni como han llegado, Fred (Bogart) parece ser el protagonista, pero un afable compañero al que conoce, tras haber sido ambos estafados trabajando y sin cobrar, se convertirá en su fiel amigo Bob Curtin(Tim Holt). La figura de un anciano curtido siembra la idea y serán tres (el papá Walter Huston que recibió óscar también). La búsqueda de oro en Sierra Madre. Hay buen corazón, buenas intenciones, Bogart reparte un premio d elotería que ha recibido para poder juntos emprender el viaje y sociedad. No faltan aventuras, los mexicanos aquí son los indios de este western atípico. Atacan trenes, son bandidos y un escollo a superar, sobre todo el jefe de la banda un tal Alfonso Bedoya.
Se trataría en todo caso de un subgénero del western el de los mineros y la fiebre del oro, con muchas particularidades, eso sí.
La transformación del corazón de cada uno de los personajes conforme va apareciendo el metal precioso, es digna de observarse. Tal y como cada uno de nosotros imperceptiblemente da un paso, y otro y nos vamos alejando de quienes fuimos o quisimos ser. Ver a través del cristal todo tipos de comportamientos humanos suscitados por la posibilidad de la riqueza, honestamente nos hace reflexionar.
Más allá de la aventura, de las escenas concatenadas que no cansan, y ni el blanco y negro ni la historia pesan, te vas dejando atrapar ante este fidedigno estudio psicológico.
John Huston, ni qué decir uno de los grandes de la Historia del Cine, se lleva la palma (oscar mejor director y guión adaptado) y hace un cameo al principio, (es quien le da limosna hasta tres veces a Bogart vestido de blanco).
La vida y la riqueza se van volando qué preferimos escoger.
Optemos, la pasta o la vida