Que esta pelicula haya conseguido tantos premios es prueba irrefutable del infumable, flojo y carente de calidad del cine español, un cine en horas bajas, muy bajas, y que ha catapultado a este año 2020 como uno de los peores, o el peor, de la historia de nuestro cine. Y claro, esto es como las fallas, aunque bajen de presupuesto, de tamaño y de calidad, al final gana una. Akelarre es una historia poco creible, aunque se base en relatos que efectivamente han pasado, como condenar injustamente a mujeres por brujeria. Pero la pelicula se mueve en un terreno repleto de fango del que no sabe salir. No impactan las interpretaciones, ni la historia, ni la fotografia, nada. Las chicas no transmiten en mi opinion en ningun momento ser conscientes de lo que pasa a su alrededor ni la importancia de los acontecimientos. Y lo mismo el inquisidor fogoso, malos personajes y malas interpretaciones. Pelicula en definitiva, prescindible, lenta, no engancha, no empatiza.