Un ladrón poco inteligente metido a detective de la noche a la mañana (Downey Jr), un detective ‘gay’ que asesora a actores (Kilmer) y una 'mujer fatal' que acaba resolviendo el caso ella solita (Monaghan). Esta es la atípica muestra de cine negro que nos propone la divertida “Kiss, Kiss, Bang, Bang” y es que han quedado atrás los años 40 con detectives tremendamente inteligentes y mujeres fatales que más que ayudar a resolver el caso, lo enredaban aún más. Sólo se mantiene la figura del narrador en primera persona que nos introduce en la historia y algunos diálogos realmente ingeniosos. Las comparaciones son odiosas, pero esta película supera la prueba.

Otra buena noticia que nos trajo esta película es la recuperación de un ‘actorazo’, Robert Downey Jr que venía de hacer ‘cosas’ como “El Detective Cantante” o “Gothika”, pero que tras este film inició su despegue encadenando buenas películas como “Buenas Noches y Buena Suerte” y “Memorias de Queens” o la grandiosa “Zodiac”, antes de pegar el ‘pelotazo’ con "Iron Man" y "Sherlock Holmes". También da su oportunidad a un actor prácticamente desaparecido como Val Kilmer, que cumple con creces y descubre a la guapa Michelle Monaghan.

Muy presente en la película está uno de los maestros de la novela negra, Raymond Chandler y no sólo por los títulos de los capítulos en que está dividido el film. “La Hermana Pequeña”, “La Dama del Lago” o “El Sueño Eterno” son algunos ejemplos. Además el inicio de la película es de lo mejorcito, tras unos muy buenos títulos de crédito, que recuerdan a James Bond, le sigue una primera escena repleta de tensión, desasosiego, y… ¡humor!