La segunda del tándem Evan Goldberg - Seth Rogen (o como yo los llamo, unos de los muchos discípulos de la cuchipandi Apatow) a la dirección y más o menos como "Juerga hasta el fin", diría incluso que por debajo de esta. Con un mejor arranque por no acumular tanta cháchara cargante sexual y escatológica, pero lejos del gran clímax final que tenía aquella. Tiene algún gag y momento divertidos, es entretenida, no es ridícula pero no es gran cosa. Mucho ruido y pocas nueces, aunque su polémica no tuviera nada que ver con su calidad, pero si es un tema que daba para mucho más y ya que te desatas, hazlo a lo grande. Tampoco destaca por su intento de parodia sobre la tv americana y la diatriba entre el periodismo de seriedad y el basura, con un sobreactuadísimo James Franco.

Ya dije en películas anteriores de la factoría y la anterior de los directores, que no se si me hago yo mayor y no me hacen tanta gracia los chistes de penes y marihuana o es que esta gente es incapaz de madurar y cambiar un registro que ya no les pega y/o han quemado. Ya no molan tanto como se creen y aunque por el ruido ocasionado, igual piensan que han tenido la idea del siglo y han hecho una obra de culto, pero una vez la gente empiece a verla, caerá en el olvido con poco más allá de la anécdota. Un aprobado raspado.