(Vale, sé que es lo peor hacer un crítica de una peli de 2005 que vi el domingo pasado en la tele)

'Sin control' es un 'mierdathriller' como tantísimos otros, pero tiene trazas de buena película, una historia con gancho y alguna interpretación notable. Es imposible no empatizar con el pobre diablo Clive Owen, que vive la peor de las penitencias imaginables sólo por haber intentado echar una canita al aire. Yo sentí la violencia correr por mis venas como pocas veces. Es más que suficiente para un film dirigido por alguien que ya de entrada nos hace claudicar con Jennifer Aniston (quien por cierto no lo hace mal del todo).