Anthony Wong en esta película interpreta uno de los mejores personajes de asesino en serie que he visto jamás, una película llena de sadismo, perversiones sexuales, asesinatos, canibalismo, mutilaciones y sobre todo mucha, mucha sangre, todo llevado al límite y sin distinción a la hora de matar, cabe resaltar que esta película tiene un departamento de policía bastante particular (cosa rara en el cine chino).
Una una obra extraña, distinta, de culto dentro del cine mundial, hongkones y la categoría III.