Bonita película con una historia que pese a lo increíble de la misma me la creo. Es la magia del cine. Si creo en orcos, si creo en aliens, si creo en la sirenita ¿por qué no voy creerme a un náufrago en un bote salvavidas cuya única compañía es un tigre? El principal problema, aunque eso es lo que la hace bella, es que abusa demasiado de las imágenes de postal. Es como un caramelo con un bonito envoltorio.
El chico protagonista tampoco me convence. No veo en él ninguna expresividad, pero como sufre y lo pasa mal me preocupo por él, por él y por el tigre. Sobretodo por este último. Suyas son las escenas de más emotividad.
Está muy bien la baza sobre que historia creer. ¿Realidad o fantasía? ¿La primera o la última? Como ya dije que para mi el cine es magia, dejo bien claro con cual me quedo, que no por eso quiere decir que sea la verdadera.