El segundo film de Uribe (que forma parte de una trilogía con "el problema vasco" como tema: "El proceso de Burgos", ésta y "La muerte de Mikel" la componen. El cineasta vasco ha retomado en parte esto en su afortunado thriller visceral/romántico "Días contados" (1994), una de sus mejores películas.
Esta relata de forma sobria y muy convincente la fuga real de un grupo de presos de ETA político-militar en la primavera de 1976 de la cárcel de Segovia. Sin pisar terreno político alguno, ésta resulta mejor arma pues es un thriller político en estado puro que utiliza la mera narración cinematográfica (aquí magnífica e inteligente) como elemento expositivo de todo lo exponible. Muy bien interpretada, tuvo un gran éxito crítico-comercial, y es una obra mucho más importante de lo que parece, pues de ahí arrancaron mucha gente importante actualmente: Javier Aguirresarrobe, Álex Ángulo, Santiago Ramos...