Hombres, mujeres y niños

Al terminar de ver esta película me he quedado por un momento conmovido. El desarrollo del filme es irregular y el ritmo es a veces torpe y lento, pero en definitiva las señales con las que se ejecuta el cierre funcionan eficazmente. Aquí, en medio de la narración coral, hay una fuerte denuncia, un anhelo reflexivo, una punzada lanzada al corazón mismo de nuestra generación atontada por la desarrollo de las redes sociales.
Los protagonistas han realizado un muy buen trabajo. Adam Sandler muestra que si se le pide un tono lúgubre es capaz de potenciarlo. Jennifer Garner se sale con la suya en el papel de madre sofocante. Y el grupo se complementa con la sensual Rosemarie DeWitt y los jóvenes Kaitlyn Dever y Ansel Elgort, que muestran una lustrosa dimensión de sus talentos actorales. En términos generales, Men, Women and Children, siendo efectista, resulta un grato trabajo, para convidar la necesaria reflexión.

De Jason Rietman esta es la película de mayor calidad, teniendo en cuenta que las otras han sido en general mediocres. Narra las vidas de varios adolescentes de un colegio americano, y la de los padres. Tiende a llevar al extremo los puntos de vista de las madres, cada una muy diferente y todas ellas muy moralmente criticables. Unos adolescentes muy adolescentes que empiezan a coquetear con la sexualidad apoyándose en la tecnología. Un dramatismo muy marcado cuyos desenlaces no dan la puntilla final a casi ninguno. Parece como que se crea un entretejido tal que se le va de las manos y deja sin acabar lo que con tanto trabajo ha creado.

El mensaje que intenta transmitir esta película es bastante confuso ya que utiliza historias inacabadas con personajes mal definidos que no consiguen implicar emocionalmente al espectador salvo en contadas ocasiones. Lo que pretende ser un retrato crítico de la sociedad extremadamente tecnológica en la que vivimos, se convierte progresivamente en un estudio freudiano de la sexualidad, dejando sólo para el recuerdo el aceptable romance de la pareja adolescente protagonista. Otro escalón que desciende en su filmografía el director y guionista Jason Reitman que debería cambiar de rumbo en futuros proyectos.

Más mini críticas en cinedepatio.com.

Una visión inteligente del mundo de Internet y las nuevas tecnologías. Nos ofrece un punto de vista realista sobre las relaciones humanas a través de Internet y cómo puede afectarnos en el sentido de pertenencia dependiendo cuál sea el reconocimiento que tenemos de los demás. Es cierto que puede ser predecible por momentos pero da que pensar sobre todo si nuestras vidas se han vuelto impersonales por esperar que los demás nos den un like en una Red social

Siempre me he preguntado cómo sería el crear una película mala a propósito, y me da que el resultado no distaría mucho del de Hombres. mujeres y niños, la nueva película de Jason Reitman. Es la primera película del director que veo, y por lo que tengo entendido llegó a demostrar algo de talento en anteriores trabajos. Lo que sí puedo afirmar, es que en esta aberración no se vislumbra ningún atisbo del talento que pudiera tener.

Hombres. mujeres y niños se encarga de repetir el planteamiento de la notable Disconnect, de Henry Alex Rubin; historias cruzadas, mismo prototipo de familia en alguno de los casos, etc. El problema llega cuando ves que en de seguir un tono bastante realista como en la mencionada anteriormente, el señor Reitman se encarga de crear un producto enteramente artificial, en el que las pocas situaciones que pudiesen tener un mínimo de credibilidad se ven eclipsadas por un "guión" de lo más nauseabundo. Pero los problemas por desgracia no terminan con el guión, pues resulta inverosímil y fallido todo aquello que forma parte de la película. Las actuaciones en su 90% resultan pésimas; la BSO está compuesta por pistas malas que acompañan peor a la película, la voz en off resulta cargante e innecesaria y el uso de las redes sociales y aplicaciones más de lo mismo - nos muestran hasta las palabras que hacen en apalabrados -. Ésto último me recuerda al brillante uso que se les da en Hermosa Juventud, mostrando únicamente lo estrictamente necesario.

Lo único que me queda por decir es que se alejen de este bodrio, que ni siquiera logra funcionar como simple entretenimiento. Es probablemente una de las peores películas de 2014, una propuesta interesante (aunque ya manida y nada original) que pierde su interés desde el primer fotograma. Lo que podemos ver en este film es una sucesión de despropósitos, a los cuales vamos llegando a través de unos personajes que son un despropósito de por sí.