Mi querido Frankie

Emotiva historia que tiene como protagonista a un niño sordomudo llamado Frankie (Jack McElhone), quien junto a su madre (Emily Mortimer) y abuela (Mary Riggans) viaja de ciudad en ciudad, sin rumbo fijo y huyendo de un pasado traumático que, afortunadamente, apenas recuerda. Para aclarar la ausencia paterna su madre le hace creer que éste es un marinero cuyo trabajo le impide visitarlos. Pero dicha mentira se volverá en su contra y acabará contratando a un desconocido (Gerard Butler) para que se haga pasar por el padre del niño.

Una de las grandes virtudes de la película es que consigue emocionar gracias a las buenas interpretaciones (tan sólo se podría poner un pero a la actuación del compañero de clase de Frankie) y a un guión que, sin resultar sensiblero, logra transmitir con acierto todo tipo de sentimientos.

Y es que los personajes principales saben ganarse al espectador prácticamente desde el minuto uno, es por ello que éste se puede implicar con facilidad en su devenir. No me gustaría terminar sin alabar también la más que correcta labor de dirección. En definitiva, Mi querido Frankie es una película de buenas intenciones y mejores resultados.