Cásate conmigo

Algo tiene esta historia que la hace diferente de todas las anteriores. Todas aquéllas tienen un final prácticamente similar, un final que es previsible y en ocasiones forzado y del cual no podemos esperar demasiadas sorpresas.

Pero esta película tiene algo que la hace distinta: sus situaciones llegan de una manera alocada, quizás algo increíble, pero que son fruto de lo precisamente son. La continuación de una original premisa inicial que nos lleva por un camino imprevisible para hacer que de vez en cuando echemos un par de carcajadas.

No desaprovechemos la ocasión de felicitar a aquéllos que nos ofrecen la posibilidad de disfrutar viendo una historia que, siendo realistas, es difícil que ocurra de verdad.

Una película que va ganando ritmo, intensidad y gracia según transcurre y se suceden los gags. Al principio parece la típica comedia romántica con alguna escena de humor absurdo pero acaba degenerando en una serie de personajes estrafalarios que conducen a situaciones hilarantes cuando se cruzan y coinciden en escena. El final ya es lo más.
A pesar de Jason Biggs, que no me hace ninguna gracia y que se ha encasillado en papeles de chico tímido e inseguro que no hace más que tartamudear y poner caras de acabar de tirarse un pedo (me recuerda bastante a Hugh Grant) y no saber muy bien dónde meterse.
La película está mejor que la media de comedias americanas y los secundarios son de lujo.
Muy recomendable.

He de admitir, que tengo algo de debilidad por Jason Biggs, el tipo me cae bien y siempre me suelo reír con sus actuaciones, está película no iba a ser menos. El desarollo es algo forzado, ya que el punto de partida es algo ridículo pero sale del paso bastante bien y he de admitir que además se hace entretenida. Sobre Biggs decir que está bastante bien pero me sorprendió positivamente Isla Fisher, que a mi en este caso me gustó más. Es una payasada, pero por lo menos es entretenida.

Cásate conmigo es una película que a priori no aporta nada pero tiene cierta frescura y un sentido del humor que la hacen digna de ver y disfrutar.
Si quieres ver un súper peliculón quizás esta no sea tu película pero si quieres ver una película para pasártelo bien y con una historia rocambolesca pero de lo mas sencilla esta es sin duda tu película.
Seguro que no lo lamentaras.

Personalmente a mi me ha gustado, claro que mi propósito al ver esta película era reirme un rato de situaciones graciosas e improbables. Obviamente que no la clasificaría como una joya en el género de las comedias, pero si uno está predispuesto a pasar un buen rato y reirse, definitivamente que es una película que se puede disfrutar.